Dos hombres buenos 1, 2 y 3 (José Mallorquí)
Año: 1955
Ediciones Cid
Portadas: Padilla
1. El alfiler de oro
2. La ley de los hombres buenos
3. Nuevo territorio
Estas tres primeras novelas de la colección forman en su conjunto la trama de venganza del protagonista, el español César Guzmán, y de su inseparable compañero, el portugués Joao Silveira, por lo que se pueden calificar como una sola novela. Desde luego, la base principal de la trama no es muy original, pero el autor sabe adornar esta historia de venganza con su indiscutible calidad literaria resultando una lectura muy atrayente e interesante. Por eso, podemos pasar por alto los típicos despistes de Mallorquí, como un personaje cuya herida parece desaparecer misteriosamente o el exagerado tremendismo del protagonista vengador. Tambien hay que decir que en ocasiones pecan de una cursilería un tanto indigesta leída hoy en día, pero hay que tener en cuenta que eran otros tiempos y los casi 70 años que tienen estas novelas inevitablemente se tienen que notar por un sitio u otro. La trama, como digo, es la de la venganza, pero está bien hilvanada y mantiene el interés en todo momento gracias a unos personajes a los que el autor sabe dar vida con su habitual buen hacer en ese aspecto. En la segunda novela aparecerá un personaje recurrente, el estrambótico juez Klein, que acompañará a los dos hombres buenos en más de una novela de la serie. Respecto a la obsesiva venganza del protagonista, hay un personaje misterioso, que es el jefe de la banda y el que mató directamente a la mujer de Guzmán, del que se mantiene el misterio hasta el final de la segunda novela. Aunque la verdad es que es fácil adivinar de quien se trata por mucho que Mallorquí se empeña en despistar al lector, hasta el punto que pueden resultar un poco incongruentes los actos de este personaje al principio teniendo en cuenta quien resultó ser...O quizá es que el autor al principio no creó ese personaje con la intención de que fuera el misterioso jefe de la banda y posteriormente decidió que sería él. Vete tú a saber. La trama, como también es habitual en Mallorquí, está adornada con ocasionales "relatos", anécdotas, o como queramos llamarlas, al estilo de las de Don César en las novelas del Coyote, principalmente narradas por el mencionado Juez Klein, aunque de vez en cuando diversos personajes sueltan alguna. En resumen, son unas novelas interesantes y bien narradas en las que el buen hacer del autor pesa más que sus inevitables defectos, resultando bastante superiores, al menos en coherencia argumental, a las de la serie El Coyote.
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