Lord Fabesham (Lou Carrigan)

 


Autor: Lou Carrigan (Antonio Vera Ramírez)

Año: 1977

 

VALORACIÓN: 👍


Cuando llega una diligencia a Nueces Valley con una serie de personajes de lo más curioso toda la atención de los aburridos ciudadanos del pueblo se centra en los recién llegados. La verdad es que son de lo nunca visto por esos lugares. Llama la atención especialmente Lord Fabesham, un inglés alto y de aire distinguido vestido impecablemente y con un sombrero de copa sobre su cabeza. Viene escoltado por un grupo, que parecen ser pistoleros, todos ellos vestidos idénticamente y con un bombín como sombrero. Además, le acompaña su sobrina, que es una joven que deslumbra por su belleza. Sobre todo, queda deslumbrado Bartholomew Nash, un pistolero que está de paso en la población. Pronto, el recién llegado empezará a causar problemas con una actitud arrogante y, en ocasiones, incomprensible, como si quisiera granjearse el odio de toda la población...

Como es habitual, una muy entretenida y correcta novela del oeste de Carrigan que mantiene el interés del lector desde las primeras páginas. Podemos pasar por alto el embarazo de la chica, que resulta casi más súbito que su enamoramiento del protagonista. Aunque, al final de la novela, las motivaciones de Lord Fabesham quizá cuesten un poco más pasarlas por alto. Lo comento en spoiler aquí abajo. Pese a estas cosas, una novela en general muy disfrutable.


SPOILER (Estás avisado)

Resulta, algo que ya se veía venir, que las intenciones del tal Lord eran matar a su sobrina para quedarse con su fortuna, Para ello ha viajado desde Inglaterra hasta el oeste americano y ha contratado un grupo de pistoleros. Ha comprado una mansión en Texas y un rebaño de miles de ovejas para soliviantar a los ganaderos de la zona, que no pueden verlas ni en pintura porque son perjudiciales para su ganado vacuno. Ha procurado por todos los medios ponerse a todos en contra. Y cuando al fin estalla la lucha, que él a provocado, su intención es matar a su sobrina, fingiendo un ataque de los ganaderos, y así librarse de cualquier sospecha hacía su persona. ¿En serio no podía haber ideado un plan menos complicado para matar a su sobrina?. En fin, creo que lo absurdo de la situación es más que evidente. 




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