Vacaciones trágicas (George H. White)

Autor: George H. White (Pascual Enguídanos)

Año: 1958

Nº 1 de Colección Policía Montada (Editorial Valenciana)

Portada: ?

128 págs.

Valoración: 😐

ARGUMENTO

El joven Alex Marble llega a Canadá desde la lejana Australia con la intención de ingresar en el famoso cuerpo de la Policía Montada y de paso entablar relación con su padre, que es casi un desconocido para él, que además forma parte de dicho cuerpo policial. Pronto descubrirá que lograr pertenecer a la Policía Montada requiere de muchos requisitos y habilidades para superar las duras pruebas y exámenes llegando a desanimarse al no estar seguro de ser capaz de lograr su deseado objetivo. Pasan los meses y al llegar las vacaciones de Navidad Alex viaja hasta el apartado puesto donde está destacado su padre para pasar esos días festivos. Lo que encuentra al llegar supondrá para el joven unas vacaciones trágicas que pondrán en riesgo su vida y a prueba sus habilidades y todo lo aprendido hasta el momento...

OPINIÓN

Este primer número de una colección que por lo visto no llegó a tener mucha aceptación, ya que solo llegó a los 20 ejemplares, en parte parece una especie de panfleto propagandístico de la Policía Montada de Canadá. Posiblemente al ser la primera entrega el autor quería "presentar" como es debido a este cuerpo policial protagonista de la colección, pero lo cierto es que hasta pasadas unas 40 paginas solo encontramos información sobre la Policía Montada y poco más. Y esto en un bolsilibro de poco más de 100 paginas resulta preocupante. Cuando llega el momento de la acción esta en un principio resulta interesante pero debido a lo escaso y simple de la trama al final no acaba de cuajar del todo. No ayuda nada tampoco parrafadas laudatorias de la Policía Montada como la que suelta el protagonista en la parte final de la novela que resulta demasiado artificiosa y hasta ridícula. De todas formas se nota la calidad literaria del autor y también tiene sus puntos de interés por lo que leer esta novela no es ni mucho menos una perdida de tiempo.

La portada, como es habitual en esta editorial que cuidaba sus publicaciones como ninguna, refleja al detalle una escena de la novela.